Recomendamos que se realice una o dos veces al año, dependiendo de la tendencia a producir sarro. Así conseguiremos eliminar la placa bacteriana evitando que se calcifique y las encías se inflamen y sangren.
Recomendamos que se realice una o dos veces al año, dependiendo de la tendencia a producir sarro. Así conseguiremos eliminar la placa bacteriana evitando que se calcifique y las encías se inflamen y sangren.